Este es mi papá
Maneja su vehículo cientos de kilómetros, usando la tecnologia como pocos, utiliza en su compu el Fotoshop... siempre está escribiendo algún informe, y sobre todo siempre está estudiando la Palabra del Señor.
Es el héroe de sus hijos... el ejemplo de sus nietos... y de muchos otros que le observan con no muy poca atención y aunque este año cumple los ochenta, nunca ha jubilado a sus sueños, ni se ha echado a descansar en sus laureles. Es un luchador empedernido,
Siempre está despierto a nuevas cosas, queriendo aprovechar el tiempo hasta lo sumo.
Poderoso hombre del Señor, que tiene por consigna nunca jubilarse. Nunca jubilarse de la vida, nunca jubilarse a estar despierto, nunca darse por vencido en un asilo.
Y cuando muchos a los treinta ya quieren retirarse, él aún está pensando como ocupar el tiempo que le queda por vivir.
Y al final... sé que morirá en la batalla, empuñando sus espadas, sin bajar la guardia, y dejando huellas imborrables que yo quisiera animarme a repetir.
Los ángeles del cielo se han quitado hasta el sombrero, observandote de lejos, y poniéndose de pié.
¡Adelante mi papito, adelante hasta el fin!